Un Virus muy Sospechoso


Un Virus muy Sospechoso
Un Virus muy Sospechoso

Esta vez es el virus H7N9. Una variante de gripe aviar que llevaría causadas 17 víctimas en China. La OMS (Organización Mundial de la Salud) subió el nivel de alerta al 6 cuando allá por 2009 montaron el show de la Gripe A. 

¿Os acordáis? Aquella gripe de la que íbamos a morir todos como chinches. Aquella gripe en la que se vendieron millones de dosis de vacunas con los consiguientes pingües beneficios.  Aquella gripe cuyas verdaderas víctimas fueron aquellos que se pusieron esas vacunas, sobre todo niños que hoy sufren sus efectos secundarios: narcolepsia, parálisis cerebral, autismo, etc. porque “casualmente” los excedentes de esas vacunas se emplearon con niños del llamado Tercer Mundo, niños que no pueden hablar ni defenderse porque ni siquiera entran en las estadísticas de población.

Este nuevo virus, el H7N9, es más de lo mismo. Misma forma de actuar: Problema-Reacción-Solución: varios casos de muerte, declaración o aviso de pandemia y creación de vacuna para solucionarlo.

Fijaos en los medios de comunicación oficialistas: ya tenemos virus nuevo. Casos de muertes relacionadas por supuesto contacto directo con aves. La siguiente declaración de la OMS: ”Siempre que un virus animal desarrolla la capacidad de infectar a humanos existe un riesgo teórico de pandemia”. Y por supuesto y aunque no se ha podido demostrar que este virus se transmita entre humanos, el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de EEUU ya ha informado que está empezando a trabajar en una vacuna, por si fuera necesaria.

De nuevo el mismo perro pero con distinto collar: la dosis de miedo diario en los informativos. Porque el miedo nos hace débiles, atenaza nuestro espíritu, doblega nuestro ánimo, nuestra mente y lo peor, nuestra capacidad de crítica y, por lo tanto, de rebeldía.